Si de disfrutar el mar se trata
Poco a poco el verano se acerca, y volar hacia el sur para descansar en una playa en México suena bastante atractivo ahora mismo. Dicen los medios especializados que a menos que, por supuesto, te acompañen 1.500 de tus amigos más cercanos, parientes, extraños, sus madres, abuelas y niños que gritan. Encontrar una playa sin explotar a lo largo de la costa de México se ha convertido en todo un desafío a medida que las ciudades adormecidas y las calas secretas a lo largo de sus costas son descubiertas, redescubiertas, instaladas en Instagram y sobredesarrolladas. Pero no es imposible. Todo lo que necesitas es un sentido de aventura y, en algunos casos, un juego de ruedas para explorar tu fantasía de Cast Away en uno de estos tramos de arena rústicos y fuera del radar.
Te invitamos aque conozcas algunos de los tesoros de méxicos. Por ejemplo, en la Costa Maya se encuentra Quintana Roo: Tulum es todo menos discreto en estos días; en lugar de llegar tarde a la fiesta, saltéala por completo y continúa hacia el sur. Prácticamente en la frontera de Belice, en el punto más meridional de Quintana Roo, se encuentra la Costa Maya, un tramo de costa muy apreciado por los lugareños. Por un lado, tiene el hermoso mar Caribe y sus colores #instaporn, y por el otro, exuberantes y verdes manglares llenos de vida silvestre. En la costa, está la Reserva de la Biosfera Sian Ka'an, donde los visitantes tienen buenas posibilidades de espiar monos y jaguares. Haz de Mahahual tu punto de partida para explorar; aunque el principal problema de la ciudad es una pequeña terminal de cruceros, es completamente amigable para los mochileros con pequeños hoteles, hostales y bares de playa. Considere Posada Pachamama, una pequeña casa de huéspedes en el corazón de la ciudad, y no se salte Nohoch Kay, un restaurante junto a la playa que sirve pescado entero bañado en ajo o salsa de vino blanco.
En Lagunas de Chacahua está Oaxaca: Lagunas de Chacahua está lo más alejada posible de la ruta conocida, amigos. Localizado entre Puerto Escondido y Huatulco, este pueblo se asienta sobre el canal que une la laguna Chacahua con el Pacífico. Los fanáticos de la playa, los mochileros y los perseguidores de la frialdad cuelgan en armonía en esta playa accidentada, un paraíso para los surfistas donde los australianos acuden cada año para perseguir olas masivas. Venga a cenar con los lugareños y visitantes en "Restaurant Row", una cadena de ubicuas chozas de playa y bares que venden diferentes versiones del mismo ceviche o taco de pescado. No espere recostar la cabeza en un lugar demasiado lujoso en Chacahua: los bungalows son los que dominan aquí, y por lo general están hechos de bambú y hojas de palmera y están disponibles por orden de llegada (el internet es algo inexistente aquí). En el lado positivo, se pueden alquilar por tan solo 100 pesos por noche.
Por otra parte tenemos a Cabo Pulmo en Baja California Sur: Si puede soportar el impulso, vale la pena 60 millas llenas de baches fuera de Cabo San Lucas para explorar la playa de 5 millas de Cabo Pulmo.
Mientras que Cabo San Lucas y San José del Cabo atienden a Richie Rich's con dinero para quemar, Cabo Pulmo es tu escondite básico, descalzo y vago en la playa, que es deliciosamente modesto y diminuto para arrancar. Rodeado por el desierto de roca roja y las montañas, la ciudad en sí misma solo tiene una población de aproximadamente 100 habitantes, servida por dos cantinas y cuatro restaurantes. ¿Qué hay que hacer, preguntas? Es el hogar del Parque Nacional Marino Cabo Pulmo, un paraíso para buzos que sin duda nos maldecirán por explotar su lugar. Las mejores (¿solo?) Opciones de hotel en la ciudad son Cabo Pulmo Beach Resort, un hotel de estilo Robinson Crusoe con bungalows equipados con cocinas y barbacoas.El hotel puede ayudar a organizar una serie de actividades locales, como buceo, snorkel, surf y senderismo.Tenga en cuenta que la mayoría de Cabo Pulmo es efectivo solamente. Sin duda, los exploradores terminarán en Villa Del Mar, una comunidad cercana donde las actividades al aire libre son el evento principal, como montar a caballo, andar en motocicleta, hacer snorkel o visitar los criaderos de tortugas.También vale la pena un viaje a Tehuamixtle, que es la "ciudad" más grande de los alrededores, aunque se asemeja más a un pueblo de pescadores con algunos bares soñolientos, soleados y con vistas al mar.No está nada mal.
Estas propuestas obtenidas por publicaciones muy especializadas en viajes, pueden ser una buena opcion para usted si decide visitar México.
