Buenos Aires, sede de hidrovía Paraná-Paraguay
El canciller boliviano Fernando Huanacuni, rubricó la pasada semana los acuerdos que confirman dos instrumentos muy importantes de la integración y la trascendencia del comercio y la vida, estableciendo la sede de la Hidrovía Paraguay-Paraná, en la capital argentina, después de que el Gobierno de Bolivia firmara los correspondientes acuerdos internacionales.
La ciudad de Buenos Aires, en Argentina, fue confirmada como la sede de la Hidrovía Paraguay-Paraná, después de que el Gobierno de Bolivia firmara los correspondientes acuerdos internacionales. Según un informe de la Cancillería de informaciones del canciller boliviano Fernando Huanacuni, con la firma de estos acuerdos se confirman dos instrumentos muy importantes de la integración y la trascendencia del comercio y la vida.
El diplomático hizo la afirmación en un acto en el cual firmó, a nombre de su país, el Acuerdo de Sede del Comité Intergubernamental y el Acuerdo Definitivo del Transporte Fluvial de la Hidrovía Paraguay-Paraná. Al acto asistieron representantes de los otros 4 países socios del sistema: Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.
La hidrovía, una autopista fluvial sudamericana de 3 500 kilómetros de longitud, vincula el extremo norte de la región del Pantanal interior boliviano-brasileño con la desembocadura del Río de La Plata en el Atlántico, pasando por territorio paraguayo.
Impulsada desde hace 25 años como alternativa segura y de relativo bajo costo para el transporte de carga y la integración de la región, quedaba pendiente la confirmación de la sede de la hidrovía en la capital argentina y el acuerdo internacional sobre normas técnicas y administrativas para su explotación, para los cuales sólo faltaba la firma boliviana a la que nos referimos y que se produjo el 9 de junio pasado. El canciller Huanacuni destacó la importancia de esa salida al Atlántico para Bolivia, que no tiene salida marítima soberana.
Por su parte, saludando la firma, el secretario ejecutivo del Comité Intergubernamental de la Hidrovía, el argentino Luis Pablo Niscovolos, expresó en el acto que esa ruta fluvial es el eje de conectividad, ayuda a la economía vinculada con el acceso a comercio internacional y otros beneficios.
Actualmente, Bolivia utiliza la hidrovía para la exportación de soja y proyecta transportar por esas aguas la producción de una acería en construcción en el megayacimiento de hierro de Mutún, en su frontera sudoriental con Brasil.
